Para su primera comunión, María volvió a contar con la ayuda de Zumo, para invitar a sus amigos y su familia a una celebración preciosa y muy divertida. Esta vez llevamos hasta allí a nuestro mago Tate, que sorprendió a todos los invitados con sus trucos y con su humor. Los peques se quedaron boquiabiertos con el mago, y también algunos papás… María pudo ser su ayudante durante gran parte de la actuación y nos encantó verla disfrutar.
Y, por si hubiera sido poco, cuando Tate se marchó, en el jardín del restaurante comenzaron a sonar los tambores… Tres indios de tribus lejanas estaban allí para invitar a los niños a aprender sus juegos y participar en una gincana que nos ocupó el resto de la tarde.
¡Gracias a María y a su familia por contar siempre con nosotros y dejarnos compartir con ellos sus mejores momentos!
El gran mago Tate
Gymkhana india
¡Pasándolo bien!