¡Nos encantan las pedidas de mano! Nos gusta muchísimo prepararlas con cariño, esperando que la idea que el novio tiene en la cabeza vaya tomando forma hasta convertirse en algo real. Nos gusta muchísimo ver la cara de él cuando llegan, intentando disimular los nervios, y cómo nos mira de reojo sabiendo que en pocos minutos nosotros haremos la introducción para que luego él saque el anillo y le pida a su chica que se case con él...
Este fin de semana hemos celebrado la pedida de mano de Miguel. Él tenía muy claro lo que quería preparar cuando se puso en contacto con nosotros. Una cena romántica en un restaurante bonito, una de sus canciones favoritas que empezara a sonar en un determinado momento, dos bailarines que aparecieran para bailar su canción y que al final, todo terminara con la pedida de mano.
Le propusimos montar una coreografía con una pareja de bailarines y actores que, al ritmo de la música, representaran la historia de la pareja. Cómo se conocieron, se enamoraron, pasaron momentos geniales y otros más complicados... Y al final, él decidió pedirle matrimonio a ella...
Todos los comensales que cenaban en el Hotel Mayorazgo hicieron silencio cuando comenzó la música y aparecieron nuestros bailarines. Poco a poco la escena se iba centrando en los novios, que miraban interesados, pero como si no fuera la cosa con ellos... Los bailarines miraban cada vez más a la novia... La canción terminaba con nuestro bailarín arrodillándose y mostrando un anillo a su compañera. Después sacaba a Migue, el novio, y nuestra bailarina cambiaba su sitio a la novia. Y ahí llegaba su momento...
¡Fue muy emocionante! La gente en el restaurante aplaudía y felicitaba a la pareja.
Os dejamos algunas fotos. ¡Qué vivan los novios!